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Nissan y Honda cancelan negociaciones de fusión

Las automotrices japonesas Nissan y Honda han decidido poner fin a las conversaciones sobre un acuerdo que habría dado lugar al tercer mayor fabricante de automóviles del mundo.

Ambas compañías, junto con su socio menor Mitsubishi Motors, acordaron “terminar” un memorando de entendimiento para unir fuerzas, según anunció Nissan en un comunicado emitido el jueves.

“En el futuro, Nissan y Honda colaborarán dentro del marco de una asociación estratégica enfocada en la era de la inteligencia y la electrificación de los vehículos, con el objetivo de generar nuevo valor y maximizar el valor corporativo de ambas empresas”, afirmó la compañía.

En diciembre, Nissan y Honda habían informado sobre el inicio de conversaciones, con un plazo de seis meses, para explorar una posible fusión. El acuerdo buscaba fortalecer su posición frente a la creciente competencia de fabricantes chinos como BYD.

La iniciativa tenía como propósito unir recursos para mantenerse competitivos en un sector que avanza hacia la electrificación. Sin embargo, las negociaciones se estancaron tras unas pocas semanas de discusión.

Según el comunicado, durante las conversaciones se evaluaron diferentes opciones para estructurar la integración empresarial. Honda propuso modificar el esquema inicial, que contemplaba una sociedad de cartera conjunta, para convertirla en una operación donde Honda asumiría el control como empresa matriz y Nissan se convertiría en su subsidiaria mediante un intercambio de acciones. Ambas partes concluyeron que la mejor decisión era poner fin a las negociaciones.

Nissan ha atravesado dificultades desde la disolución de su alianza con la automotriz francesa Renault. Actualmente enfrenta graves problemas financieros, lo que ha llevado a analistas a especular sobre una posible bancarrota en 2026, cuando la empresa deberá afrontar el vencimiento de una abultada deuda.

Entre abril y septiembre de 2023, Nissan registró una caída del 94% en sus beneficios en comparación con el mismo periodo del año anterior. La empresa sufrió pérdidas en su negocio automotriz y solo obtuvo un leve margen de ganancia gracias a su división financiera. En respuesta a esta crisis, Nissan anunció una reducción del 20% en su producción, lo que conllevará el despido de 9.000 trabajadores. Además, recortó en un 70% su previsión de beneficios operativos anuales.